sábado, 27 de julio de 2013

REMEDIOS NATURALES PARA TRATAR LAS OBSTRUCCIONES DE LAS VIAS BILIARES


El blog de farmacia nos sigue dando buenos consejos



La bilis es un líquido producido por el hígado que es transportado por las vías biliares hacia la vesícula.
Cuando hay una obstrucción en las vías biliares, la bilis se acumula en el hígado y no puede seguir su camino hacia el intestino delgado. Esta afección produce varios malestares en el cuerpo.
La mayoría de las personas que tienen obstrucciones en las vías biliares es a causa de cálculos o piedras pero hay casos donde son otras las razones.
viasbiliares
Síntomas de obstrucciones en las vías biliares: 
-dolor abdominal
-ictericia o color amarillento en la piel
-nauseas
-hinchazón
-orina color marrón
-fatiga
-pérdida de peso
-fiebre
-heces blanquecinas

Remedios naturales para tratar obstrucciones en las vías biliares:
-Preparar una infusión con la hierba diente de león ayudara a bajar la inflamación de las vías biliares y a estimular el buen funcionamiento de la vesícula. 1 o 2 veces al día puede consumirse esta infusión.
-La infusión de manzanilla es muy eficaz para desinflamar la vesícula e hígado y aliviar los síntomas a causa de la obstrucción en las vías biliares.
-La infusión de menta también es muy efectiva para los problemas de vesícula e hígado por lo que se recomienda beberla después del almuerzo y cena.

Es importante tratar las obstrucciones en las vías biliares porque el mal funcionamiento del cuerpo en esta área puede complicarse y derivar en cuadros más graves.
Hay tratamientos médicos para esta patología que se pueden complementar con los remedios naturales.

miércoles, 24 de julio de 2013

ALERGIA A LA LACTOSA














La caseína representa el 84% de las proteínas lácteas y es uno de los componentes de la leche de vaca que más alergia causa junto a la a-Lactoalbúmina y b-Lactoglobulina. La leche de vaca contiene un 300% más de caseína que la leche materna, de ahí su implicación en muchos de los procesos alérgicos.
La caseína es una sustancia áspera, densa, pegajosa y muy espesa que tiende a acumularse en el sistema respiratorio y aparato digestivo siendo muy difícil de eliminar por el organismo. Los síntomas alérgicos que produce la caseína suelen ser a nivel gástrico y muy similares a los ocasionados por la intolerancia a la lactosa, de ahí que a veces ambas patologías se confundan.
A nivel respiratorio la caseína es culpable del exceso de mucosidad que padecen muchas personas que toman leche de vaca ya que llega incluso a obturar las vías respiratorias. Está demostrado que los niños que cursan con episodios respiratorios recurrentes debido a un exceso de moco mejoran si la caseína es retirada de sus dietas.
¿Qué ofrecer a cambio?
Si se quiere continuar ofreciendo leche de origen animal, la de cabra se convierte en este caso en la alternativa perfecta porque sus valores de caseína son prácticamente nulos. ¡Pero ojo! La leche de cabra comparte con la de vaca otro tipo de proteínas alérgicas por lo que sólo se debe ofrecer a niños no alérgicos que quieran mejorar sus problemas respiratorios o a aquéllos que sólo tengan alergia a la caseína.
Otras fuentes proteícas como las bebidas vegetales (soja, arroz, avena, avellanas…) y las leches hidrolizadas (en donde la caseína está tan fragmentada que se vuelve fácilmente asimilable por el cuerpo humano) son alternativas saludables para los alérgicos a la caseína.

Otra información de www.lactosa.org


¿Qué es la lactosa?
La lactosa es un azúcar que está presente en todas las leches de los mamíferos: vaca, cabra, oveja y en la humana, y que también puede encontrarse en muchos alimentos preparados. Es el llamado azúcar de la leche, (C12, H22,O11) disacárido natural compuesto de glucosa y galactosa.


¿Qué es la Lactasa?
La lactasa es un enzima producida en el intestino delgado, que juega un papel vital en el desdoblamiento de la lactosa (proceso necesario para su absorción por nuestro organismo) en sus dos componentes básicos: glucosa y galactosa. Si los niveles de lactasa son bajos o ésta no realiza bien su labor desdobladora, aparecen dificultades para digerir la lactosa.






¿Qué es la intolerancia a la lactosa?

La intolerancia a la lactosa significa que no hay suficiente enzima (lactasa) en el intestino delgado para romper toda la lactosa consumida. La lactosa digerida parcialmente o no digerida pasará al intestino grueso y es allí que es descompuesta por las bacterias del intestino grueso, generando las sustancias de desecho Hidrógeno (H2), Anhídrido carbónico (CO2), Metano (CH4) y ácidos grasos de cadena corta que provocan todos sus síntomas: dolores, hinchazón abdominal, diarrea, etc. También es conocida como intolerancia a productos lácteos, deficiencia de disacaridasa, deficiencia de lactasa, intolerancia a la leche.

¿Qué síntomas intestinales directos provoca?
Los síntomas se presentan frecuentemente después de la ingestión de productos lácteos.

Náuseas
Dolor abdominal
Espasmos
Hinchazón y distensión abdominal
Gases abdominales y flatulencias
Diarreas ácidas
Heces pastosa y flotantes
Defecación explosiva
Vómitos
Enrojecimiento periana


¿Qué otros síntomas inespecíficos puede causar?
Al existir una alteración de las mucosas intestinales también pueden producirse una serie de síntomas inespecíficos en cualquier parte del cuerpo.

Abatimiento
Cansancio
Dolores extremidades
Problemas cutáneos
Alteraciones de la concentración
Nerviosismo
Trastornos del sueño


¿A que razas afecta más?
Parece que existe una clara relación causa-efecto con el hábito de tomar leche. Aquellos pueblos que han sido tradicionalmente "ganaderos", que se han alimentado generación tras generación de la leche de los animales, presentan menos casos de intolerancia a la lactosa que otros pueblos no acostumados a su consumo. La mayoría de la población mundial adulta tiene déficit de lactasa, excepto la población del norte y centro de Europa.


¿Qué tipos de intolerancia existen?

1. Intolerancia primaria o genética



PROGRESIVA E INCURABLE

Se produce una pérdida progresiva de la producción de la lactasa, y por tanto una pérdida gradual de la capacidad de digerir la lactosa. Suele darse a lo largo de la vida en ciertos grupos étnicos y tiene una causa genética. La personas con esta intolerancia van notando como la ingesta de leche les causa cada vez más síntomas. Más del 70% de la población mundial padece de esta intolerancia. Cuando es de carácter primario/genético no existe curación posible porque el individuo no recupera el enzima y los síntomas sólo se alivian con la suspensión de los productos lácteos en la dieta. La intolerancia a la lactosa no es peligrosa y es muy común en los adultos, quienes en su mayoría al llegar a los 20 años de edad muestran algún grado de intolerancia.

2. Intolerancia secundaria
TRANSITORIA Y CURABLE

La disminución de la producción de la lactosa es secundaria, ya que esta provocada por un daño intestinal temporal que tiene otra causa (ver posibles causas). Una vez la persona está curada y cuando la mucosa intestinal se ha regenerado, desaparece la intolerancia a la lactosa.

Posibles Causas:
· Después del destete, la cantidad de lactasa producida se reduce si el niño no está continuamente expuesto a la lactosa a través de su dieta. Por eso es importante introducir la lactosa de forma gradual. Al principio el bebé sólo puede digerir el calostro (agua rica en proteínas, sales minerales y factores inmunológicos). Después éste se va enriqueciendo con lactosa y lípidos hasta dar lugar a la leche definitiva. La leche de la madre se va haciendo más completa al ritmo de las enzimas del bebé. Es por tanto el organismo el que aumenta o disminuye las enzimas según sus necesidades, un desajuste en este proceso es el que provoca esta intolerancia infantil.
· Problemas intestinales provocados por virus, bacterias o parásitos.
· Celiaquía (enteropatía inducida por el gluten)
· Enfermedades intestinales (Chron)
· Intolerancia a las proteínas de la leche de vaca
· Malnuitrición ligada a una diarrea prolongada
· Operaciones quirúrgicas del intestino delgado
· La toma de ciertos antibióticos
· Situaciones de malnutrición (anorexia o bulimia)

3. Intolerancia completa o Alactasia



DESDE NACIMIENTO E INCURABLE

Esta forma poco frecuente es provocada por un defecto congénito o genético del enzima. Es imprescindible prescribir una dieta sin lactosa al lactante para evitar lesiones y complicaciones graves en su desarrollo.


¿De qué métodos de diagnóstico disponemos?

A. Test de hidrógeno en el aliento (método más utilizado)


Al paciente se le suministra una solución con lactosa (25-50g de lactosa en 200-400ml de agua) y a intervalos posteriores de tiempo de 15 minutos se le hace soplar unas bolsas herméticas o probetas de donde se recogen muestras. Cuando los azúcares no digeridos son transportados al intestino grueso, las bacterias presentes allí lo utilizarán como alimento y crearán hidrógeno como producto de desecho. El hidrógeno es absorbido por el caudal de sangre y expedido en la respiración. El hidrógeno detectado en la respiración indica que el azúcar ha entrado en el intestino grueso no habiendo sido bien absorbido en el intestino delgado. Se debe constatar un aumento del hidrógeno en la respiración tras la ingesta de la lactosa y en base al resultado se determinará su grado de intolerancia. ejemplos de resultados positivos/negativos al test (gentileza de ISOMED Pharma)

B. Test sanguineo de sobrecarga de lactosa


Primero al paciente se le hace una extracción de sangre para conocer su glucemia basal (nivel de glucosa en sangre inicial). Después, como en el test del hidrógeno, se le suministran 100 gramos de lactosa en una solución con agua. Seguidamente pasados 60 y 120 minutos se toman de nuevo muestras de sangre. Si no se produce la liberación de la glucosa -por la ausencia de la acción de la lactasa que debería estar en el intestino- no se produce una absorción de la glucosa al torrente sanguíneo a través de la pared intestinal y por tanto no se incrementa el nivel de glucosa en la sangre y por tanto se puede decir que existe una intolerancia a la lactosa. Se puede afirmar que existe intolerancia a la lactosa si la glucemia (nivel de glucosa en sangre) después de la toma de la lactosa no sube más de 14,4mg/dl (0,8mmol/l) respecto al valor basal (inicial). ejemplos de resultados positivos y negativos

C. Biopsia del intestino delgado


Las muestras de una biopsia del intestino delgado pueden obtenerse por EGD (esófagogastroduodenoscopia) u otra endoscopia del tracto gastrointestinal superior. Se introduce un tubo flexible de fibra óptica (endoscopio) a través de la boca o nariz hacia el tracto gastrointestinal superior. Las muestras de tejido obtenidas durante la endoscopia son enviadas al laboratorio para ser examinadas. Se constata la presencia o no de lactasa en la mucosa intestinal.




D. Test genético


Estudios recientes establecen que la actividad de la lactasa está asociada a la presencia de dos polimorfismos identificados en el gen MCM6. Este método consiste en extraer y amplificar el ADN de una muestra -de sangre o saliva del paciente- , continuando con un protocolo de hibridación en tira para así detectar los polimorfismos C/T 13910 Y G/A 22018. El resultado final son una serie de bandas coloreadas sobre una tira que se interpretan con ayuda de una plantilla. En función de las distintas combinaciones que se encuentren, se puede determinar si un paciente es intolerante a la lactosa o no. Ejemplo de resultado positivo y y negativo y documentación relacionada sobre este método de diagnóstico comparado con el test del hidrógeno (gentileza de Operon)


¿Existen diferentes niveles de intolerancia?
La sensiblidad a la lactosa puede variar ampliamente, -algunas personas notan sus efectos de forma inmediata tras consumir pequeñas cantidades, mientras otras tienen un umbral de sensiblidad más alto y es más difícil de observar su relación causa-efecto-. Dependiendo del nivel de intolerancia, cada persona tolerará una cantidad más o menos alta de lactosa al día. Hay personas que permanecen de forma asintomática toda su vida sino sobrepasan una determinada cantidad de lactosa al día. Así nos encontraremos con personas que toleran perfectamente los quesos (que contienen si son curados muy poca lactosa) o los yogures (dónde gracias a sus bacterias parte de la lactosa se ha convertido en ácido láctico) y en cambio presentan síntomas claros al ingerir un vaso de leche. Cada persona debe conocer cuál es su nivel de tolerancia. Ver termómetro de contenido de lactosa de diferentes alimentos en la sección El Semáforo. La sensibilidad puede también cambiar con el tiempo y con el estado general de salud. Un episodio agudo de diarrea, causada por una infección, puede reducir temporalmente los niveles de lactasa y hacer más sensible a la lactosa de forma temporal.

Sensibilidad lactosa   Cantidad diaria tolerada
ALTA  De 1 a 4g
MEDIA           De 5 a 8g
BAJA  De 9 a 12g

¿Por qué es importante detectarla y tratarla rápidamente?
Porque la lactasa es una de las enzimas intestinales más delicadas y vulnerables. Si seguimos tomando lactosa, se agrandará la lesión en la mucos intestinal y se producirá un círculo vicioso: lesión de la mucosa/malabsorción de lactosa que será cada vez más difícil de solucionar.


¿Cómo vivir con la intolerancia?
La falta de leche en la dieta puede producir falta de Calcio, Vitamina D (necesaria para la absorción del Calcio), Riboflavina y proteínas. Las complicaciones más comunes son la pérdida de peso y la malnutrición. Por tanto, resulta esencial consumir otros productos ricos en estas sustancias, así como las dosis diarias recomendadas de vitamina A, C, Fósforo, Magnesio i Potasio (los cuáles ayudan a la absorción del calcio).
Fuentes alternativas de obtención:
Calcio: Sardinas, salmón, tofu, gambas, col, espinacas,...




Vitamina D: Aunque la crea el propio organismo cuando se expone al sol, una rica fuente es el hígado de bacalao.


¿Y si no quiero renunciar a los lácteos qué alternativas tengo?
Si no quieres renunciar al sabor y propiedades nutritivas de la leche de vaca, desde hace unos años puedes encontrar en el mercado marcas de leche cuya lactosa se ha eliminado o hidrolizado previamente de forma parcial llamándose “bajas en lactosa” o total “sin lactosa”. Una oferta que se ha complementado con productos derivados lácteos como quesos en diferentes variedades -gouda, emmental, etc -, quesos rallados, yogures, batidos de sabores, nata, crema, etc...También en nuestro país, ya puedes encontrar suplementos de lactasa en forma de pastilla/cápsula que te permitirán consumir productos lácteos. Se recomiendan para uso uso esporádico si comes fuera de casa y no estás seguro de si los platos contienen o no lactosa, cuando acudes a una cena de negocios, una celebración, etc. Estas pastillas se comercializan en países como Estados Unidos, Canada, etc. des de hace años y las puedes encontrar en el supermercado. PDF Estas pastillas lo que hacen es aportar a nuestro organismo la lactasa que necesitamos para desdoblar la lactosa de una comida en concreto, así que deberás de tomarla cada vez que hagas una comida porque su efecto es momentáneo. Su principal inconveniente radica en encontrar tu dosis adecuada, ya que ésta siempre dependerá de la relación entre: Tu grado de intolerancia / cantidad de lactosa ingerida.