QUISTES OVARICOS
Los quistes de ovarios son una afección frecuente en las
mujeres. Los quistes son formaciones benignas que son como unos pequeños sacos
llenos de líquidos.
Los quistes
si son pequeños pueden ser tratados por la medicina convencional pero también
con la natural.
Síntomas de
los quistes ováricos son:
-dolor abdominal
y en zonas de espalda y piernas
-trastornos
menstruales
-inflamación
abdominal
-problemas de fertilidad o
dificultad para lograr el embarazo
Consejos
para tratar los quistes de ovarios:
-La dieta puede ayudar a combatir los quistes. Se recomienda
el consumo de verduras verdes crudas, frutas, cereales integrales, ajo, legumbres. Hay que evitar el alto consumo de café, alcohol,
huevo, azúcar refinada, carnes roja, bebidas gaseosas y la comida chatarra en
general.
-Algunas hierbas que ayudan a combatir los quistes de
ovarios como el ginseng, trébol rojo,
bardana, ruibarbo, albahaca, cola de caballo, te verde y el
aceite de onagra.
-Tomar jugo de remolacha con melaza es un
remedio casero muy bueno para tratar los quistes de ovarios.
El tratamiento más usado por los
médicos para tratar los síntomas de los quistes de ovarios es el uso de
pastillas anticonceptivas. Pero en los casos más graves de quistes de ovarios
deben ser retirados con una cirugía.
Los síntomas
que producen los quistes en los ovarios se pueden tratar medicamento e incluso
complementar con remedios naturales.
Es
importante controlar periódica el estado de los quistes para evitar que
pudieran transformarse en malignos o aumentar su tamaño y empeorar la patología.
A su hija la han
diagnosticado una afección llamada síndrome del ovario poliquístico (PCOS por
sus siglas en inglés). El PCOS es un desequilibrio hormonal que afecta los
ovarios (órganos que contienen los óvulos de la mujer) y posiblemente también
el resto del cuerpo. Si se deja sin tratar, el PCOS puede ocasionar graves
problemas de salud. El tratamiento no puede curar el problema, pero sí ayuda a
reducir los síntomas y a evitar trastornos de salud.
¿Qué es el PCOS?
Los andrógenos son un tipo de
hormona (mensajero químico del cuerpo); a menudo se denominan hormonas “masculinas”,
pero el cuerpo de la mujer también produce y usa algunas de estas hormonas. Las
niñas y las mujeres con PCOS tienen niveles mucho más elevados de andrógenos de
lo normal. Estas elevaciones pueden ocasionar ciertos cambios en el cuerpo como:
Múltiples quistes (sacos
llenos de líquido) en los ovarios
Ausencia o irregularidad de
las menstruaciones, o períodos muy ligeros
Mayor crecimiento del vello
corporal
Ciertos medicamentos pueden
ayudar a controlar los síntomas de PCOS.
Aumento de peso
Empeoramiento del acné y la
caspa
Zonas gruesas u oscurecidas
en la piel
Debido a los cambios
hormonales, las mujeres con PCOS tienen un mayor riesgo de desarrollar ciertas
afecciones de salud serias como la diabetes tipo 2, la hipertensión (presión
arterial alta) y trastornos del corazón y los vasos sanguíneos. A menudo, las mujeres
con PCOS tienen problemas de fertilidad (capacidad para quedar embarazadas).
¿Cuáles son las causas del
PCOS?
Se desconoce la causa exacta
del PCOS, aunque es más probable que una niña lo tenga si su mamá o una de sus
hermanas lo tiene.
¿Cómo se diagnostica el PCOS?
No existe una prueba única
que de por sí permita diagnosticar el PCOS. La historia clínica, un chequeo médico
y los análisis de sangre ayudan a emitir el diagnóstico. También podrían
hacerse exámenes pélvicos y otras pruebas, tales como una ecografía de la
vagina o la pelvis.
¿Cómo se trata el PCOS?
El tratamiento más común para
el PCOS son ciertos medicamentos que afectan los niveles hormonales del cuerpo.
Los medicamentos utilizados con más frecuencia para tratar el PCOS son:
Las píldoras anticonceptivas
orales, que contienen una combinación de hormonas femeninas. Estas pastillas
pueden ayudar a normalizar el equilibrio de las hormonas y reducir o eliminar
los síntomas. (No es necesario que una adolescente mantenga relaciones sexuales
activas para tomar anticonceptivos orales.)
La metformina, un medicamento
antidiabético que ha demostrado aliviar los síntomas del PCOS.
Antiandrógenos, unos
medicamentos que pueden contrarrestar los efectos de las hormonas masculinas,
reducir el crecimiento del vello y eliminar el acné. Generalmente se recetan
junto con los anticonceptivos orales.
Además de los medicamentos,
hacer ejercicio regularmente y llevar una dieta sana pueden ayudar a controlar
el PCOS. Aunque el PCOS dificulta mucho la pérdida del peso, adelgazar aunque
sea un poco puede ayudar a reducir algunos de sus síntomas. Hable con el
proveedor de atención médica de su hija para obtener más información sobre el
adelgazamiento y el PCOS.
Su colaboración con el
proveedor de atención médica
Ya que el PCOS no se puede
curar, es importante controlar la afección de su hija. Manténgase en contacto
con el proveedor de atención médica de su hija, hablándole con sinceridad sobre
la efectividad del tratamiento y la respuesta de la niña; menciónele si nota
algún cambio nuevo. Y lleve a su hija a hacerse chequeos de control regulares
para garantizar que le detecten y controlen cualquier problema de salud.
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